“El Gobierno Nacional considera como su deber principal revivificar en la nación el espíritu de unidad y cooperación. Preservará y defenderá aquellos principios básicos por los cuales fue edificada nuestra nación. Considera la Cristiandad como la fundación de nuestra moralidad nacional, y la familia como la base de la vida nacional”. Adolf Hitler.

sábado, 12 de marzo de 2011

LA GUARDIA DE HIERRO DE RUMANIA Y LA IGLESIA ORTODOXA

Símbolo de la Guardia de Hierro, la cual es una cruz triple, representando barras de prisión (como símbolo del martirio), a veces llamada “La Cruz del Arcángel Miguel”. La Guardia de Hierro (en rumano Garda de Fier) fue un movimiento fascista, ultranacionalista, ultraortodoxa y antisemita rumano, convertido luego en un partido político, que existió desde (1927) hasta la Segunda Guerra Mundial.

Corneliu Zelea Codreanu (Cornelius Zelinsky, 1899 – 1938). Fundador de la Organización ultraortodoxa, ultranacionalista, antisemita y fascista rumana Guardia de Hierro o Legión de San Miguel Arcángel. Tras la disolución del Parlamento y el establecimiento de una monarquía dictatorial por el Rey Carol II en (1938), Corneliu Zelea Codreanu fue encarcelado junto con otros legionarios; poco después, aparentemente en el curso de un intento de fuga, fue abatido por los guardias, aunque es probable que su asesinato haya sido deliberadamente instigado por el rey.

Corneliu Zelea Codreanu y la Iglesia Ortodoxa Rumana.

La Guardia de Hierro fue fundada por Corneliu Zelea Codreanu, el (24 de julio de 1927), bajo el nombre Legión de San Miguel Arcángel, y fue liderado por Codreanu hasta su muerte, en 1938. Los adeptos y miembros del movimiento eran llamados “legionarios”. En marzo de (1930) Codreanu formó la Guardia de Hierro, una rama paramilitar y política de la Legión, cuyo nombre llegó a aplicarse a la Legión entera. Más tarde, en junio de (1935), la Legión cambió oficialmente su denominación, pasándo a llamarse partido “Totul pentru Ţară” ("Todo para el País").

Los miembros de la Guardia de Hierro llevaban uniformes verdes (considerados símbolo de rejuvenecimiento, y merced a ello recibieron el apodo de “Camisas Verdes”) y se saludaban entre ellos como los romanos.

Corneliu Zelea Codreanu dejó su importante posición en la “Liga de la Defensa Nacional-Cristiana”, partido político (liderado por el profesor A. C. Cuza) para fundar la “Legión de San Miguel Arcángel”. Dicho grupo se diferenció de los demás movimientos fascistas de su época por su carácter religioso, por su forma de aceptar y aplicar el cristianismo ortodoxo rumano. La Legión de San Miguel Arcángel “insertó voluntariamente varios elementos del cristianismo ortodoxo en su doctrina política, hasta el punto de convertirse en uno de los pocos movimientos políticos modernos de Europa con una estructura ideológica religiosa”.


Corneliu Zelea Codreanu y la Iglesia Ortodoxa Rumana.

La Guardia de Hierro se caracterizó porque su base de adherentes y militantes estuvo formada mayoritariamente por campesinos y estudiantes, y no masivamente por veteranos de guerra. Sin embargo, los legionarios tuvieron en común con los fascistas europeos su carácter violento, rasgo que se acentuó aún más cuando, a fines de (1933) se constituyó un gobierno autoritario moderado que prometía el desmantelamiento del fascismo en Rumania. Ante esas circunstancias, la Legión contraatacó organizando las unidades de acción directa, llamadas echipa mortii, las mismas que el 29 de diciembre asesinaron al Primer Ministro del recién elegido gobierno, el líder del Partido Nacional Liberal Ion Duca.

Como otros movimientos fascistas clericales de su tiempo, como los Lăncieri (Lanceros), con los que chocaba frecuentemente en la violencia callejera, la Guardia de Hierro era activamente antisemita, promoviendo la idea de la constante “agresión rabínica en contra del mundo cristiano”, bajo formas como: la francmasonería, el psicoanálisis, la homosexualidad, el ateísmo, el marxismo, el bolchevismo, o la Guerra Civil de España, que, según ellos, tenían el propósito de minar la sociedad.

Corneliu Zelea Codreanu y la Iglesia Ortodoxa Rumana.

El “Capitán” Corneliu Zelea Codreanu fue su líder carismático, siendo la Legión conocida por su hábil propaganda, incluyendo el espectáculo, usando marchas, procesiones religiosas (con “milagros” incluidos), así como himnos patrióticos y partisanos, trabajo voluntario en el campo y campañas caritativas en zonas rurales. Toda esta acción se orientó para imponer el pensamiento típico de la tercera posición, es decir ultraderechista, ultranacionalista, anticomunista, antisemita, antiliberal, anticapitalista y antiparlamentaria, a fin de presentarse como una alternativa patriótica a los partidos “corruptos y clientelistas”, incluyendo la Liga de la Defensa Nacional-Cristiana. El propósito declarado de la Legión fue la creación de un “hombre nuevo”, que debería anteponer a todo su país y su religión, superando los intereses mezquinos del liberalismo y el comunismo.

La Guardia de Hierro ganó notoriedad por su participación en el Holocausto. En su libro “La destrucción de los judíos europeos”, Raúl Hilberg escribió: “There were... instances when the Germans actually had to step in to restrain and slow down the pace of the Romanian measures”. (“En algunas ocasiones los alemanes tuvieron que intervenir para ralentizar las medidas rumanas”). La aniquilación de los judíos del este de Rumanía (incluyendo aquí a Besarabia, Bucovina, Transnistria y la ciudad de Iaşi) tuvieron más bien el carácter de un pogrom que el de transportes y campos de concentración bien organizados como los de los alemanes.

Corneliu Zelea Codreanu y la Iglesia Ortodoxa Rumana.


El (10 de diciembre de 1933) el Primer Ministro Liberal Ion Duca prohibió la Guardia de Hierro. Como respuesta, miembros de la misma lo asesinaron, el (29 de diciembre de 1933), en la plataforma de la estación de tren de Sinaia, cuando regresaba de una entrevista con el Rey.

En las elecciones parlamentarias del año (1937) la Legión de San Miguel Arcángel se alzó como la tercera fuerza política más votada, después del Partido Nacional Liberal y del Partido Nacional Campesino, con un 15,5 % de los votos. El Rey Carlos II se opuso enérgicamente a los propósitos políticos de los legionarios y consiguió mantenerlos fuera del gobierno hasta (1940), cuando se vio forzado a abdicar dada la situación política nacional y europea. Durante este período la Legión fue duramente perseguida desde el poder. Ante la decisiva influencia que la Legión de San Miguel Arcángel había ido cobrando en la política rumana el (10 de febrero de 1938) el Rey disolvió el gobierno y se proclamó 
Dictador Real.

Corneliu Zelea Codreanu fue detenido y encarcelado en abril de (1938), muriendo la noche de (29-30 de noviembre de 1938), junto con otros legionarios, estrangulados por los gendarmes que les escoltaban durante su traslado a la prisión. A la vista de estos hechos se difundió la noticia de que el gobierno inventó el intento de evasión de los legionarios para eliminar a Codreanu como principal opositor. Codreanu y los demás fueron asesinados por orden del Rey, quizás como reacción al asesinado de 24 de noviembre de un amigo de Armand Călinescu, entonces Ministro del Interior.

El (7 de marzo de 1939) se formó un nuevo gobierno, con Armand Călinescu como Primer Ministro; el (21 de septiembre de 1939) Armand Călinescu fue asesinado por un grupo de legionarios que vengaron a Corneliu Zelea Codreanu, sumándose así a otros actos de violencia en Rumania.

Durante los primeros meses de la segunda guerra mundial, Rumanía fue oficialmente neutral. Sin embargo, después del Pacto Molotov-Ribbentrop del (23 de agosto de 1939), que estipuló, entre otras cosas, el "interés" soviético en Besarabia, las promesas francesas e inglesas no fueron de más ayuda a Rumanía que a Polonia. Cuando Alemania invadió Polonia, Rumanía ofreció asilo a los miembros del gobierno polaco e incluso después del asesinado de Armand Călinescu, el Rey Carlos II intentó mantener la neutralidad. Sin embargo, después de la capitulación de Francia y de la retirada británica de Europa, el acercamiento al Eje Roma-Berlín-Tokio se hizo inevitable.

Ante estos acontecimientos la situación política se hizo favorable para los legionarios. El gobierno de Ion Gigurtu, formado el (4 de julio de 1940), incluyó a un miembro legionario. Pero antes de la llegada al poder, el movimiento legionario había ido perdiendo a la mayoría de sus líderes carismáticos; Horia Sima, un antisemita convencido, llegó a ser el líder nominal del movimiento después de la muerte de Corneliu Zelea Codreanu, fue uno de los pocos legionarios prominentes que habían sobrevivido para encarar su compromiso con el poder.

En el (4 de septiembre de 1940), la Legión entabló una alianza no exenta de tensiones con el general (después mariscal) Ion Antonescu, formando el gobierno del “Estado Nacional Legionario” después de la abdicación forzada del Rey Carlos II. Rumanía se acercó de esa manera todavía más al Eje, al que se unió oficialmente en junio de 1941. Horia Sima fue nombrado Vicepresidente del Consejo de Ministros.

Una vez en el poder, desde el (14 de septiembre de 1940), hasta el (21 de enero de 1941), la Legión de San Miguel Arcángel endureció la legislación antisemítica y empezó una campaña de pogroms y asesinatos políticos, así como de chantaje y extorsión a los sectores comerciales y financieros judíos. Más de 60 antiguos funcionarios y oficiales fueron ejecutados en la cárcel de Jilava (la misma donde fue encarcelado Corneliu Zelea Codreanu)- mientras estaban aguardando juicio; a su vez el historiador y antiguo primer ministro Nicolae Iorga o el economista Virgil Madgearu, antiguo ministro, fueron asesinados sin haber sido siquiera detenidos.

Pero el (24 de enero de 1941) Ion Antonescu consiguió suprimir un golpe de estado legionario, eliminando a los legionarios del gobierno. Durante la guerra civil de 3 días, la Legión fue responsable por un pogrom en Bucarest, incluyendo la matanza de docenas de judíos en un matadero, donde los asesinos colgaron los cuerpos de los ganchos y los mutilaron. Horia Sima y muchos otros legionarios se refugiaron en Alemania; mientras otros fueron encarcelados.





1 comentario:

  1. En Rumania no hubo holocausto contra los judios. SI hubo campamentos que abrieron tiendas que hacian concurencia alcomercio judio que ya tenia las reiendas en muchas zonas. Los ministro asesinados projibieron los campamentos y la campania de construccion de edificios para escuelas y bibliotecas para el medio rural. Tambien he de mencionar que despues de reivindicar el asesinado los legionarios asesinos se entregaron a la policia y fueron ejecutados.

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